Cuando me dijeron que visitaríamos este Monasterio mis ojos se iluminaron, pero leyendo mi pensamiento enseguida me aclararon “pero no esperes encontrar un Monasterio y menos de ese material”. Y agradezco que me lo hayan avisado porque menuda desilusión hubiera tenido.
En realidad su nombre proviene del Río Piedra, junto al cual se fundó el Monasterio en 1194, en el Castillo de Piedra Vieja. Las construcciones fueron apareciendo y desapareciendo a lo largo de los años, pero lo que siempre se mantuvo es el Parque, donde el río es una constante y la naturaleza lo acompaña moldeándose a él.
Para quienes gustan de caminar por senderos naturales, descansar bajo la sombra de árboles y enredaderas varias, maravillarse con las vistas al salir de una gruta o simplemente cerrar los ojos y escuchar el sonido del río y las aves, es un paseo totalmente recomendable.
Para mayor información pueden visitar la pagina web del Monasterio donde encontraran todo lo referente a actividades y servicios que posee.
Un paseo bastante agradable... mira que he pasado cerca de este lugar unas cuantas veces y nunca lo ví, ahora la próxima no lo dejare escapar, no lo hacía tan bonito.
ResponderEliminarTu como siempre, llevandonos de viaje, mi querida afición.
Beso.
Pues si, es muy bonito Lola. Estas fotos fueron hechas en primavera, pero me dicen que dentro de dos semanas, con las hojas otoñales, será un placer visitarlo. No sé si podré ir en esas fechas pero lo tendré en cuenta para el año próximo. A ver si coindimos, ¿si?
ResponderEliminarUn beso.
Yo fuí hace años en otoño, una maravilla!! pero eso sí estaba a reventar de gente, me dije que volvería entre semana pero nunca lo hice y ahora ya me queda un poco lejos.
ResponderEliminarPreciosas fotos.
Un beso